La Fiscalía ha aceptado que Leo Messi y su padre, Jorge Messi, paguen una multa en sustitución de la condena de cárcel que hay sobre ellos. La Audiencia de Barcelona es quien tendrá la última palabra del caso.
Finalmente ni el jugador del FC Barcelona ni su padre, Jorge Messi, entrarán en prisión después de que la Fiscalía haya aceptado que paguen una multa en sustitución de la condena.
La Audiencia de Barcelona condenó a Leo Messi a 21 meses de cárcel y a su padre a 15 por defraudar 4,1 millones de euros en los ejercicios de 2007, 2008 y 2009. Pero el jugador, por el momento no tendrá que entrar en prisión. Según han informado a EFE fuentes jurídicas, la Fiscalía ha aceptado la suspensión de esa pena de prisión para Messi y su padre al carecer ambos de antecedentes penales.
A través de un escrito, la Fiscalía ha manifestado que no se opone a que se suspenda la entrada en prisión y en su lugar tendrán que pagar una multa cuya cuota máxima es de 400 euros diarios. De esta manera, Leo Messi tendría que abonar en total una multa de 255.000 euros, y su padre de 180.000.
El ministerio público acepta esta suspensión, argumentando que tanto el futbolista como su padre son "delincuentes primarios", carecen de antecedentes y además ambos han aceptado de volver a Hacienda los 4,1 millones de euros que defraudaron. No obstante, la Audiencia de Barcelona es quien tiene la última palabra en este caso y deberá decidir si Messi y su padre ingresan en prisión o no.
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